Tabata Trejo
¿Quién soy?
PROFESORA AUTORIZADA NIVEL 2
POR SHARATHJI JOIS
SHARATH YOGA CENTRE (SYC)
Me llamo Tabata Trejo y nací en Venezuela. Desde muy pequeña la actividad física entró a formar parte de mi vida y a los 3 años ya hacía gimnasia olímpica. La práctica intensa de deportes extremos me acarreó muchas lesiones y, justo eso, fue lo que me acercó al taichí y al yoga. Con 18 años adopté este último como un estilo de vida y empecé a practicar diariamente; así pues, puedo decir que llevo más de la mitad de mi vida practicando yoga.
Mis primeros maestros en Yogashala, Caracas, (Venezuela) fueron Antonio Rojas, Juan Carlos Linares, Xiama Lima y Mariangel Romero. Ellos me inspiraron a abrazar la vida yogui y por ello les estaré eternamente agradecida.


Miami
México
En México tuve el privilegio de poder participar en un intensivo de ashtanga con la primera maestra autorizada por Pattabhi Jois en Latinoamérica, Olivia Martínez. También allí, mi experiencia se enriqueció aún más gracias a la práctica con el maestro Michael Gannon, quien además me brindó la oportunidad de trabajar en su equipo en Yogaloft, Playa del Carmen.
Barcelona y viajes a la india
En 2014 llegué a Barcelona y empecé a compartir mi experiencia de yoga en varios espacios como La Shala, Mandiram, Zentro Yoga, Viuvida o Yogabody. Al mismo tiempo, mi etapa formativa me llevó por fin a India, donde pude practicar con quien desde entonces se ha convertido en mi maestro, Sharath Jois, Sharathji (gurú del linaje del Ashtanga Yoga).
Desde que empecé a practicar en Mysore, mis viajes a India se han repetido cada año y sigo los workshops de Sharathji cada vez que viene de gira a Europa. La práctica en India me ha permitido además profundizar mis estudios de filosofía y sutras con la maestra Jayashree, profesora de sánscrito y filosofía hindú en la Universidad de Mysore.


Mi proyecto
En 2017 sentí que era el momento de compartir mis conocimientos en mi propia sala; así es como nace mi proyecto en Barcelona, donde cada día se imparten clases de ashtanga al estilo tradicional según el linaje.
En estos años de trabajo en la esterilla me he dado cuenta de que todos estamos luchando a diario con las presiones que generan el entorno laboral, familiar, la sociedad… y muchas personas se acercan al yoga con la necesidad de sentirse mejor con su cuerpo y su mente.
¿Qué he aprendido?
La convicción profunda de que a través del yoga puedo ayudar a colmar esta necesidad me ha empujado a adentrarme en un estudio más profundo del cuerpo que me permita trabajar de manera más responsable y consciente en los ajustes y ejercicios que propongo en la sala.
Así es como en 2019 termino un máster en fisioterapia y otro en rehabilitación deportiva de la Escuela Esneca; tengo la suerte de poder aplicar este conocimiento de manera personalizada con mis alumnos cada día en la práctica de mysore.






Una noticia inesperada que cambió mi vida...
En 2020, empecé a tener muchas lesiones, dolores y otros síntomas desagradables. Después de varios reconocimientos médicos, los doctores me dieron la noticia que no esperaba: tenía una enfermedad autoinmune. Esta enfermedad me limitó en cuerpo, mente y alma, pero mi fe y confianza en el Ashtanga Yoga me hicieron más fuerte y no me di por vencida. Pasó más de un año hasta que pude obtener un diagnóstico más preciso: lupus. Es una enfermedad con un nombre que significa sistema inmunológico débil y confuso, se confunde por mil razones.
Cuando tenía limitaciones físicas severas y no podía hacer casi nada, mi alegría era hacer al menos una postura sin dolor. En algún momento pensé que no volvería a la India ni a mi esterilla ni a ningún lado. La práctica no es fácil porque requiere DISCIPLINA, DETERMINACIÓN, DEVOCIÓN y DEDICACIÓN, y sobre todo no flaquear ante los gustos y disgustos; pero para lograrlo se necesitan años de experiencia, paciencia y un buen maestro, mucha humildad y un gran corazón.
La bendición de mi maestro
A pesar de todas las adversidades, estoy feliz y orgullosa de haber terminado la serie intermedia con mi maestro y recibir su bendición en el 2022 para seguir transmitiendo el método de Ashtanga Yoga. Soy Profesora Autorizada Nivel 2 Serie Intermedia Completa por el Sharath Yoga Centre. Cada año, envío a algunos de mís alumnos para seguir aprendiendo bajo la mirada de mi querido maestro Sharath Jois.

Un milagro ocurrió en 2023
Antes de ser diagnosticada con lupus, tuve una pérdida de un bebé de un poquito más de 3 meses y luego 5 años de infertilidad hasta 2023. Los tratamientos para la artritis provocada por el lupus son quimioterapia, así que no podía ni siquiera intentar quedar embarazada y había una bomba de tiempo, mi edad.
Esto nos llevó a la ciencia y congelamos nuestros embriones para cuando yo estuviese mejor intentar una transferencia. En 2022, decidí dejar la medicación tóxica (la quimio) y para sorpresa de los doctores no tuve más brotes, así que me encontraba muy bien y no me daban más ese medicamento.
En mi cumpleaños, en 2023, por una cuestión de salud, fui al médico y en ese momento nos enteramos que estaba embarazada. Embarazo espontáneo, sin transferencia, sin buscar qué día ovulo ni nada y con más de 40 años. Ha sido, hasta el nacimiento del bebé, un embarazo muy cuidado donde he estado muchos días en urgencias ya que todo lo que ha pasado en mi proceso requiere una vigilancia extra. No tuve un embarazo de una mujer de 20 años, completamente sana, pero todo salió bien. Necesité muchos cuidados, mucha renuncia de mi ego, de todo lo que hacía, de mi práctica fuerte de Ashtanga Yoga, de mis apegos más profundos, y acepté las cosas que no me gustan como parte de la vida. Todo eso es inevitable y vivir en una burbuja nos hace daño, nos debilita y nos lastima profundamente.

He tenido un bebé nunca pensé que podría pero ha sido así. No planifiqué nada y tampoco planifique el parto ni la lactancia ni cómo sería, iba viviendo día a día el sueño que no podía creer que se hacía realidad dentro de mí.
Al llegar el momento de tener que “decidir” cómo sería el parto pues solo le pregunté a mi doctora que con toda mi condición que sería lo mejor para mi y me dijo cesárea. Así lo hice porque confíe en mi doctora y en la naturaleza. En ese momento sabía que mi condición estaba demasiado condicionada para que la naturaleza pudiera intervenir en mi valga la redundancia, así que decidí sin lamentos y con muchas ganas tuve a mi bebé con una cesárea maravillosa.
El mismo día ya me levantaba y caminaba por la habitación. Por supuesto es una cirugía mayor y hay que tener muchos cuidados pero me he ido recuperando bastante bien y Leandro está estupendo que es lo importante.
Al llegar a casa le presenté a mis otros dos amores perrunos, Roman y Marley. Todavía están un poco como extrañados pero siguen con su misma rutina. Y SÍ, se montan en la cama y Leandro está con la misma flora que ellos. Ahora sigo recuperándome, dando clases y talleres y volviendo poco a poco a la práctica, respetando mi nueva rutina y la transformación de mi cuerpo.












Saraswati y Sharath Jois
En total, he hecho 2 viajes a India para practicar con Saraswati y más 5 viajes a Mysore para practicar con mi maestro Sharath Jois. También hice 7 workshops de Ashtanga Yoga por Europa con mi maestro, en Estocolmo, Copenhague y Madrid. En la temporada del 2023, mi maestro me invitó a asistirle para ajustar a los alumnos en Mysore. También tuve la increíble oportunidad de practicar 2 semanas de Mysore y Guiadas con mi maestro en un workshop en Miami y de asistirle durante 1 semana.
¿Y ahora...?
Soy experta en adaptar la práctica y trabajar con los alumnos que tienen lesiones, embarazadas (pre y post parto) y enfermedades autoinmune. ¡El Ashtanga Yoga es para todos!
Mi camino sigue, sigue mi práctica diaria, seguirá mi esfuerzo por asistir a los workshops de Sharathji, seguirán mis viajes a India. Sigue mi empeño en compartir con quien lo desee lo que amo y es mi pasión: el yoga.
«You come»